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CALLEJON CONVERGENTE

El proyecto del callejón convergente fue desarrollado en el segundo semestre del 2021, en el curso de proyecto edilicio básico del taller Velazquez. Un curso que “...propone un abordaje escalar, buscando acercarse al anteproyecto desde las lógicas propias del pensamiento de la ciudad al de la organización interior.”

En dicha instancia se nos dio la posibilidad de elegir entre x predios, todos implantados en el barrio la aguada, en Montevideo. Dentro de estos se encontraba un predio pasante entre la calle constitución y defensa.

Desde la elección del mismo comenzamos a hacernos algunas preguntas: ¿dónde vamos a estar? ¿Qué queremos hacer? ¿qué queremos decir?

Al comenzar a responder cada una de ellas, nos infiltró la problemática de ¿qué condiciones tiene la ciudad y para quién está construida?

Nos posicionamos fuertemente sobre la idea de callejón, cuestionando para quien es segura una ciudad patriarcal, y un fenómeno urbano que siempre ha estado ligado al miedo.

Nos hermanamos con esta idea y generamos un nuevo callejón sobre nuestro predio, intentando revitalizar y darle valor de plaza a un espacio cuidado, implantando una manera consciente de mediar el espacio y generando un nuevo paso seguro para el barrio.

Este cuestionamiento nos habilitó a indagar sobre una variable que atraviesa cualquier proyecto, la transmutación a través del tiempo, entendiendo que la forma en la que se habitan y apropian los espacios sufren cambios.

Es así que las viviendas encuentran su forma a partir de la agrupación de módulos de 3,5 x 3,5m, con una conformación mínima de 1 módulo húmedo + un módulo de vivienda. Desde este punto de partida cada vivienda se puede ampliar, transformar o transmutar según su conveniencia.

La estructura metálica que “envuelve” el edificio permite adosar nuevos módulos, dando la posibilidad de ser este un espacio abierto en el que únicamente se adosen barandas y pavimento, o un nuevo módulo interior.

Este sistema de “jaula” permite inyectar sobre la fachada de los espacios colectivos, espacios a disposición; estos son módulos que se encuentran a disposición constante y a demanda del colectivo, habilitando un uso no permanente del espacio, de propiedad colectiva y de uso no definido.

La planta baja libre del edificio se encuentra sobre medio nivel por encima de la calle, donde bajan módulos transparentes que se proyecta que serán apropiados por actividades culturales y comerciales. Este espacio se encuentra en constante diálogo con la plaza pública que se materializa como un callejón.